Todos los seres humanos, en algún momento de nuestra vida hemos sentido miedo por algo, sentimos una sensación que nos paraliza y comenzamos a manifestar físicamente algunos síntomas como dolor de estomago, sudoración, escalofríos y nerviosismo.
Muchas veces, ese miedo que nos paraliza es producto de nuestros pensamientos negativos, por ejemplo: si tenemos que hablar en público y de pronto sentimos que no nos hemos preparado lo suficiente, comenzamos a pensar que todo nos va a salir mal, que el tema se nos puede olvidar y peor aún que se van a reír de nosotros y vamos a quedar en ridículo.
Hemos hablado en oportunidades anteriores, sobre el poder que tienen nuestros pensamientos y como en este caso, si pensamos que algo nos va a salir mal antes de iniciarlo, por ley es lo que vamos a manifestar.
Si a una persona le gusta otra y siente temor de acercarse y decirle, es porque en un principio ya tenía en mente que lo podían rechazar y en caso de que esto pasara, si realmente le dijeran que "No", que es lo peor que pudiese pasar?. Si nunca nos atrevemos hacer o decir algo por temor, siempre vamos a estar paralizados y con miles de dudas, sobre que hubiese ocurrido si nos hubiésemos atrevido.
Existen muchos temores en cada uno de nosotros, lo importante es saber afrontarlos, atrevernos, pensar que tan malo puede ser si lo hacemos, al fin y al cabo, la vida va continuar su curso y cada quien su camino; si nos equivocamos, si nos dicen que no, si no decimos lo que queremos o sentimos, realmente que tan malo puede ser?, quizás debamos preguntarnos si somo nosotros lo que nos complicamos la vida con situaciones que de pronto sucedan o no.
Afrontemos nuestros miedos, pensemos en que vamos a lograr eso que tanto queremos, continuemos y no olvidemos si pensamos negativo atraemos negativo y viceversa. Te repito cual lorito: Enfocate en lo mejor, en lo positivo, en lo que realmente te hace feliz y todo eso es lo que vas atraer a tu vida.
